El banquete

La extensa y variada obra de Platón (c. 428 c. 347 a. C.) ofrece en El banquete -traducido y anotado en esta edición por Fernando García Romero- un estilo y una configuración peculiares, condicionados por la elección del escenario (una conversación después de una comida) y la naturaleza del tema tratado (el amor, esencial y recurrente a lo largo de la obra platónica).

Como señala Carlos García Gual en la introducción a esta edición, la habilidad literaria de Platón despliega un abanico de perspectivas con versátil retórica que permite al lector advertir la complejidad de los enfoques posibles, para luego establecer, a través de la iluminada revelación de Diotima, su propia teoría. El impulso erótico trasciende lo terreno y singular de los objetos corpóreos para remontarse a la Belleza eterna, que es el objetivo último de ese anhelo de procrear en la belleza: el impulso erótico se sublima en una escala dialéctica, hacia esa idea de la Belleza, que es también el Bien.