Plegarias atendidas

La expectativa que despertó Plegarias atendidas en el mundo entero no tiene antecedentes, al punto de que se la ha llamado con justicia "la novela más famosa de la literatura norteamericana antes de su publicación". Finalmente, apareció en edición póstuma en el otoño de 1987.

P. B. Jones, el narrador protagonista de esta novela, es un escritor advenedizo -bisexual, desenfadado, in genioso, "maldito"- que no pierde ocasión de hablar de sí mismo, pero que tampoco carece de talento para convertir a personas y personalidades del gran mundo en personajes de una ficción cuyos valores plagian o subvierten convenciones reales. Ante la mirada de este testigo de cargo desfilan, entre otros, actrices como Greta Garbo, escritores como Tennessee Williams, millonarios como Niarchos y seres de una compleja superficialidad cuyo mayor ejercicio consiste en comentar con malicia la vida sexual de los otros. Además, genios subrepticios y célebres nulidades que resplandecen y se extinguen de acuerdo con los rigores de la puesta en escena.

Pero la última novela inconclusa del gran escritor norteamericano es también una confesión que no oculta, bajo los brillos del narrador frívolo y mundano, las intuiciones, las sospechas, los miedos y la amargura de un espectador implicado en la trama. Truman Capote construye en Plegarias atendidas una galería de máscaras fulgurantes, una vasta feria de vanidades de la que se desprende, vertiginosa o estática, una visión diferente, particularísima, de la sociedad norteamericana