Martín Fierro

Pueril parecería presentar a nuestros lectores el clásico argentino por excelencia, el libro que ha sobrevivido a varias generaciones y que así continuará en lo venidero. Pero recordar acaso lo que de él ha dicho un gran exégeta, un conocedor como pocos de su riqueza interior, es no sólo actualizar valores que son ya indestructibles, sino reverdecer aquellas frases que alguna vez en el tiempo tuvieron su valor.

"El sentido humano –dice Eleuterio F. Tiscornia– que fluye del poema y funde sus dos partes en un todo armónico, revela el rango excelso de héroe que tiene Martín Fierro, cuya energía personal, avasalladora en todos los momentos de la acción, alcanza el grado máximo con el sacrificio del propio individualismo y el acatamiento de las normas sociales.

Es visible que Hernández cifra en esa suprema heroicidad la verdadera razón de que perduren en los argentinos el recuerdo de su poema y la admiración por el héroe."