La novela histórica

La novela histórica nació en la época de la caída de Napoleón, cuando Walter Scott publicó Waverley. Base económica e ideológica para su creación fueron las vastas transformaciones del ser y la conciencia del hombre producidas en toda Europa a raíz de la Revolución Francesa. Si la novela histórica es un género aparte con sus propias leyes artísticas, se debe a que ha captado en forma auténtica y profunda la vida de los pueblos.
Georg Lukács trata en este libro las más importantes cuestiones de teoría y de principio teniendo en cuenta el papel tan considerable que la novela histórica ha desempeñado tanto en la URSS como en el Frente Popular Antifascista. Muestra cómo este género nace, se desarrolla, alcanza su florecimiento y decae como necesaria consecuencia de las grandes revoluciones sociales en los tiempos modernos.
Obra surgida de un impulso teórico, este ensayo aborda fundamentalmente el tema del historicismo en literatura y aclara su significación intelectual y estética para las letras de los siglos XIX y XX. Lukács se ha concentrado en la investigación de las acciones recíprocas entre el espíritu histórico y esa literatura que se afana por exponer la sociedad en su totalidad. El segundo aspecto metodológico decisivo es el examen de la acción recíproca entre el desarrollo socioeconómico y la cosmovisión y forma artística surgidas a partir de ese desarrollo.
La novela histórica de Georg Lukács resulta, en consecuencia, un paso firme hacia una estética marxista y un tratamiento materialista de la historia literaria moderna.