A propósito de Dolores
Uno de los más famosos escritores ingleses de nuestro tiempo nos hace asistir a la experiencia atroz de trece años de matrimonio convertidos en "el caso de Stephen Wilbeck contra Dolores". Dolores, con su belleza exótica, con su personalidad absorbente, con su crítica despiadada y su neurosis de exacerbado egotismo, irrumpe en la vida de Wilbeck hasta trastornarla y casi anularla. Pero el contacto diario de estas dos esencias humanas provoca una serie de mutuas reacciones de las que el hombre sale más consciente, más aleccionado sobre su verdadera misión en el orden de la naturaleza y de la vida.
"Esa muchacha no es simplemente algo bello en sí, sino que me ha atrapado en una fase en que todo conspira para destacarla como un símbolo de algo... un mundo perdido en que yo podría vivir y no vivo."
Porque la vida es muy distinta del amor imaginativo, y tiene realidades imperiosas que el autor analiza valiéndose de las múltiples facetas del matrimonio como de un prisma de singular luminosidad y eficacia que va enfocando a lo largo de éste que él denomina "un relato sobre la felicidad y la soledad del espíritu."